Por Adoración y Liberación el 28/02/2019 •
El cardenal condena el “silencio” del Vaticano sobre la homosexualidad en la cumbre de abusos. Los organizadores de la reciente cumbre sobre el abuso sexual en el Vaticano evitaron deliberadamente el tema de la homosexualidad para promover una “agenda homosexual” en la Iglesia y proteger las redes de homosexuales que prosperan en un “clima de complicidad y conspiración del silencio ”, ha manifestado de forma tajante Brandmüller.
Brandmüller afirma que este silencio debe de romperse, y nos anima a los comunicadores a seguir “siendo fuertes, decisivos y claros” al exponer los escándalos. “La falta de doctrina moral es la raíz y se remonta a décadas”- ha manifestado.
Vicente Montesinos
En una entrevista en National Catholic Register, el cardenal alemán Walter Brandmüller ha manifestado que “discutir el problema de la homosexualidad se habría vuelto peligroso para ellos, porque es evidente que hay una red de homosexuales dentro del Vaticano“. “Ese es el problema, no hay duda“, concluye.
“Este es un silencio que llama a romperse“, agregó el cardenal. Dijo que el “trabajo de los comunicadores” desempeña un papel crucial para romper este muro y, por lo tanto, nos instó a continuar “siendo fuertes, decisivos y claros al exponer los escándalos”
Los comentarios del cardenal Brandmüller se producen una semana después de que él y el cardenal estadounidense Raymond Burke firmaran una trascendental carta abierta a los obispos que asisten a la cumbre del Vaticano sobre la protección de los menores en la Iglesia; para poner fin al silencio sobre la corrupción moral en la Iglesia y volver a defender lo divino y la Ley natural. Los dos cardenales, que también firmaron la dubia de 2016 y le pidieron a Francisco que aclarara su enseñanza moral en Amoris Laetitia, cosa que jamás hizo, pidieron a los obispos que alzaran sus voces contra la corrupción moral en la Iglesia.
“Un acto decisivo ahora es urgente y necesario“, dijeron, pidiendo el fin de la “plaga de la agenda homosexual” en la Iglesia, las redes organizadas de protección y el “clima de complicidad y de conspiración de silencio“.
Ahora Brandmüller ha dicho que está “muy decepcionado” por el resultado de la reunión, y que no se discutieron las causas fundamentales. “El silencio sobre la homosexualidad es un problema real” – afirma.
Al preguntarle qué parte del problema se debe a un colapso en la doctrina moral de la Iglesia, Brandmüller ha dicho claramente que “la falta de doctrina moral es la raíz y se remonta a décadas“.
Pero no se ha detenido ahí; y de forma valiente y tajante ha afirmado: “A finales de la década de 1960, y a principios de la década de 1970, la enseñanza de la moral en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma fue herética. Entonces actuaron los profesores disidentes: Fuchs, Bernard Häring y Charles Curran. Ofrecieron su enseñanza, los jóvenes escucharon estas conferencias y luego comenzaron a practicar la homosexualidad. Y la universidad norteamericana en ese momento fue un centro de homosexualidad” – ha relatado el Cardenal.
El cardenal ha elogiado las iniciativas laicas como la protesta silenciosa de la semana pasada en Roma, para “oponerse a la política de silencio de la homosexualidad del Vaticano“, antes de la cumbre de la semana pasada sobre el abuso sexual clerical; así como la tarea de quienes denunciamos de forma incansable lo que está sucediendo. Un verdadero espaldarazo de Brandmüller a nuestra tarea.